Estudio muestra que vacuna rusa contra el COVID-19 sería 100% segura y produce anticuerpos
Científicos del Fondo de Inversión Directa de Rusia (RDIF) y el Centro Nacional de Investigación en Epidemiología y Microbiología Gamaleya en Rusia anunciaron la publicación de la revista médica The Lancet, donde muestra los resultados de los ensayos clínicos de la Fase I-II de la vacuna rusa Sputnik V contra el COVID-19.
“Con esta publicación respondemos a todas las preguntas de Occidente que se hicieron diligentemente durante las últimas tres semanas, francamente con el objetivo claro de empañar la vacuna rusa”, dijo Kirill Dmitriev, director del RDIF, que ha respaldado el procedimiento.
Los científicos defendieron el registro de su vacuna antes de tiempo, debido a que las muestras iniciales internas mostraron una gran eficacia, y fue registrada con todas las normas de las autoridades sanitarias rusas.
De acuerdo a los científicos, en septiembre se presentarán los estudios completos de los ensayos de la vacuna en primates, hamsters sirios y ratones transgénicos, en los que la vacuna mostró una protección eficaz al 100%. En octubre y noviembre en tanto, está prevista la publicación de los primeros resultados de los estudios clínicos post-registro de fase 3, ya en curso, con la participación de 40 mil voluntarios.
Los investigadores destacaron los avances de su fármaco, señalando que Sputnik V se distingue de otras vacunas porque los resultados de las investigaciones clínicas de fase 1 y 2 “no mostraron acontecimientos adversos severos, mientras que la incidencia en otras vacunas candidatas oscila entre el 1% y el 25%”. De hecho, mencionan que el número de participantes en los ensayos clínicos de la vacuna rusa que recibieron dos inyecciones “es 4 veces mayor que el número de sujetos que han recibido dos inyecciones en los ensayos de AstraZeneca/Universidad de Oxford”.
En los dos ensayos realizados en junio y julio de este año, en base a 76 voluntarios, “en el 100% de los participantes la vacuna Sputnik V generó una respuesta inmunitaria humoral y celular estable. Al mismo tiempo, el nivel de anticuerpos neutralizantes del virus en los voluntarios vacunados fue entre 1,4 y 1,5 veces mayor que el nivel de anticuerpos en las personas que ya se habían recuperado del Covid-19″.
Además os investigadores añadieron que, “En comparación, el nivel de anticuerpos en los voluntarios que recibieron la vacuna de AstraZeneca/U. de Oxford fue aproximadamente igual al nivel de anticuerpos de aquellos que ya habían superado una infección por coronavirus. También cabe destacar que en los estudios clínicos de Sputnik V, en todos los voluntarios se formó inmunidad de células T, que se manifestó en células que aseguran la identificación y destrucción de células infectadas por SARS-CoV-2″.
Otra ventaja tiene que ver con la eficacia de la plataforma de vectores adenovirales humanos, a pesar de la preocupación por la posible presencia en los vacunados de inmunidad preexistente a los adenovirus humanos.
En tal sentido, los investigadores dijeron que se determinó la dosis óptima segura, que permite lograr una respuesta inmunitaria eficaz en el 100% de los vacunados, incluso en aquellos que han tenido recientemente una infección por adenovirus. “Esto disminuye la urgencia para desarrollar nuevas vacunas en base a plataformas no estudiadas y que no han sido probadas durante muchos años”, mencionan los científicos.
Sin embargo, en la revista científica The Lancet también mencionan que “se necesitan ensayos grandes a largo plazo que incluyan una comparación de placebo y un mayor control para establecer la seguridad y eficacia a largo plazo de la vacuna para prevenir la infección por Covid-19”.
La producción de la vacuna podría comenzar en noviembre.